Nueve licitadores competirán por desarrollar el proyecto ‘MiMurcia’, dotado con ocho millones de euros y cuya finalidad es mejorar la calidad de vida de los ciudadanos mediante la aplicación de las herramientas tecnológicas. Así lo comunicó en la mañana de ayer el alcalde, José Ballesta, durante la jornada ‘Murcia Smart 2018′, organizada por el Ayuntamiento y ‘La Verdad’, que se desarrolló en el Palacio Almudí con la asistencia de representantes de corporaciones de referencia en el campo de la innovación, como Telefónica, IBM, NEC, Huawei, BlaBlaCar e Indra.
Las firmas que han presentado propuestas para llevarse el importante contrato del organismo estatal Red.es, dependiente del Ministerio de Economía, son en su mayoría uniones temporales, como las que forman Emurtel y NEC, la creada por Telefónica e Informática El Corte Inglés y la que ha unido a Wellness Telecom y Revenga. Otras UTE son Sice-Emerfya, Idom-Kapsch MiMurcia, Ibermatica-Imesapi-Ikusi y la liderada por la firma regional Everis, que va de la mano con Retevisión 1 y la también murciana Regenera Levante. Además, dos compañías compiten en solitario: Deimos Space e Indra Soluciones Tecnológicas.
«Todas las empresas que han optado a este concurso público son líderes nacionales e internacionales en el sector de las ciudades inteligentes», valoró Ballesta, quien recordó que ‘MiMurcia’ ofrecerá desde el primer minuto una serie de ventajas inmediatas para los vecinos. «Se trata de poner los avances tecnológicos al servicio de las personas para hacer una ciudad más equitativa, con mayores dosis de igualdad», concluyó Ballesta.
El director general de ‘La Verdad’, Antonio González, puso de relieve el compromiso que este diario ha tenido con el avance de la Región a lo largo de sus 115 años de historia. Recordó que en 2018 se ha celebrado el veinte aniversario de laverdad.es y resaltó que la redacción conoce al instante tanto el número de usuarios que consumen el producto informativo como las noticias que leen.
Blancanieves con Twitter
La jornada contó con dos mesas redondas. La primera de ellas se centró en definir el concepto de ciudad inteligente y se inició con la intervención de Javier Concha, director de Negocio para Europa de NEC, una multinacional con sede en Japón. Comenzó con una referencia a Blancanieves, señalando que si la protagonista del cuento hubiera vivido en estos tiempos de redes sociales, hubiera tenido la información suficiente para detectar que su madrastra le iba a dar una manzana envenenada. Recurrió Javier Concha a este símil para subrayar la importancia de que las ciudades cuenten con un cerebro que condense toda la información posible para ponerla a disposición de sus respectivos departamentos. Puso el ejemplo de Bristol, en Gran Bretaña, donde los cuartos de aseo de las casas cuentan con unos botones de socorro que, al ser pulsados, llevan directamente la alarma a los servicios de emergencia, que pueden enviar de forma inmediata las ambulancias a la vivienda en cuestión y salvar así vidas.
«Una ciudad inteligente es aquella que puede predecir los problemas y aportar recursos para solucionarlos a través de la disponibilidad de la información», dijo Elisa Martín Garijo, directora de Tecnología e Innovación de IBM en España, Portugal, Grecia e Israel. Hizo referencia a tres proyectos innovadores que su compañía desarrolla en Madrid, Barcelona y Málaga, así como en una ciudad danesa que celebra un macrofestival de música y que ha sido banco de pruebas durante tres años para un programa orientado a predecir el comportamiento de los usuarios, tanto en gustos musicales como en hábitos de consumo, y adelantarse a ellos con la prestación de servicios. «Las ciudades inteligentes van a entender a sus ciudadanos y les ofrecerán servicios adaptados», avanzó Martín Garijo.
Huawei no solo desarrolla teléfonos móviles, sino que está avanzando como fabricante mundial de operadores. En el foro del Palacio Almudí su representante fue Carlos Moreno Postigo, quien relató las iniciativas que se están llevando a cabo para aprovechar la información que aportan miles de ciudadanos anónimos con las fotografías, vídeos y audios que realizan ellos mismos con sus dispositivos móviles, que sirven para planificar los servicios, como planes de emergencias. «Una persona que esté grabando una incidencia se convierte en un punto de información a tiempo real. El contenido del vídeo se podrá ver en una central, de modo que posibilitará actuar más rápidamente», indicó Moreno Postigo, quien recalca que «estamos viviendo una cuarta revolución industrial, a la que tendrán que adaptarse las empresas».
Por su parte, el director de Servicios Digitales y Sector Público de Telefónica, Bruno Vilarasau, ensalzó el proyecto ‘MiMurcia‘, considerando que los habitantes de la capital «son muy afortunados de contar con un Ayuntamiento que piensa en ellos». Elogió la utilidad de las nuevas tecnologías para la vida cotidiana, admitiendo que él mira todas las mañanas Google Maps para ubicar dónde están las retenciones de tráfico y planificar su ruta para ir al trabajo, con lo que ahorra tiempo y estrés. Vilarasau comentó ejemplos de proyectos que desarrolla su compañía en ciudades como Valencia y Sevilla. En esta última, «se ha mejorado el funcionamiento del puerto gracias a la tecnología». «La evolución está siendo más rápida entre los usuarios que entre las empresas e instituciones», reflexionó.
Alberto Bernal, directivo de Indra, se refirió a la plataforma Sofía, que su empresa ha puesto en marcha y que ha sido reconocida en la Unión Europea. Habló de que las ventajas de la innovación pueden servir a Murcia para «mejorar el protocolo de actuación ante olas de calor, mejorando el sistema de avisos y gestión de eventos, concentrando en un único punto información de diferentes departamentos».
Economía colaborativa
La segunda mesa comenzó con Cristina San Juan, de ARUP, quien desgranó los proyectos de entornos urbanos sostenibles desarrollados en México y Madrid por su firma, así como la importancia de incidir en la sostenibilidad en un mundo cada vez más árido por el cambio climático. «La revolución digital se puede ir de las manos si no se pone al ciudadano y al medio ambiente en el centro de la actuación», advirtió.
Itziar García Sagarzazu, de BlaBlaCar, relató la experiencia de éxito de esta popular empresa, que cuenta con 132.000 usuarios en la Región. Un municipio como Molina de Segura, además, concentra 450 viajes al mes, según un estudio reciente. García abogó por explorar la vía de la economía colaborativa.
Por último, Elena González, del organismo público Red.es, se mostró satisfecha «porque la ola ‘smart’ está llegando a todo nuestro país fruto del esfuerzo compartido que estamos realizando entre todas las administraciones».
